Vilanova i la Geltrú R2-Turó i Castell de Miralpeix-Sitges R2
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Statistik för leden
- Avstånd
- 13,63 km
- Höjdökning
- 186 m
- Svårighetsnivå
- Lätt
- Höjdsänkning
- 177 m
- Max höjd
- 100 m
- TrailRank
-
84
4,8
- Min höjd
- −0 m
- Ledtyp
- Ej i slinga
- Tid
- 7 timmar 36 minuter
- Koordinater
- 1246
- Uppladdad
- 9 juni 2022
- Registrerad
- juni 2022
i närheten av Vilanova i la Geltrú, Catalunya (España)
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Vägbeskrivning
Rutas Complementarias:
Anem pel litoral des de Sitges a Cubelles
Per Sitges,Castell i Turons
Garraf i GR-92 ens porten a Sitges
Jornada de reencuentros y despedidas, tiempo sin vernos, alegría desmedida, y tiempo de ausencia nos espera, con gran melancolía. Al contrario que en la famosa canción, comienza el verano y con él, la dispersión. Los caminos se separan, pero unidos quedamos con el corazón. Bulle el andén de vida, mescolanza de fiesta y de obligación, apelotonados con rostros serios, aquellos que tienen compromiso laboral, relajados y distendidos, los que partimos hacia la diversión. Curiosamente, al llegar a la estación, unos y otros por separados caminos, llegarán a la reunión, unos sentados esperando ser atendidos, y los otros, ajetreados , servirán. Bochorno, mezcla de humedad y calor, golpea nuestros rostros, no en vano el sol madrugó más que nosotros, y llegando al puerto de Vilanova, la bucólica imagen de los cosedores de redes, aquellos que ya sirvieron largos años y los que no superaron el mal de mar. Héroes anónimos y necesarios , cumpliendo sus humildes tareas con devoción. La silueta del Faro nos atrae, y aunque por temprano está cerrado, observamos con interés por las rendijas, apuntando en el debe la visita que perdemos. Coqueteamos con el tren y con la playa, hasta con un búnquer medio derruido, antes de encaminarnos hacia el interior. Nos acoge una pista donde medio nos tapan las ramas, del inclemente sol, al que al fin burlamos, brevemente, al penetrar en sendero. Ruinas de ermita y castilllo nos esperan en la cima, hermosas vistas y algo de brisa. El descenso por asfalto, nos regala las mansiones más o menos acaudalas, y hacemos juegos de palabras con infinity , piscinas y fiestas, resultando en infinity pool party, y todas las variantes que imagineis. Nos ponemos serios al llegar a la Llacuna de la Riera de Ribes. Ya hace tiempo que parecen intentar cortar el Gr, poniendo barandillas, quitando escalones y ahora poniendo tejas y cuerdas, ya que el paso costero está cubierto de agua con marea alta. En nuestra ignorancia no sabemos si culpar a políticos, hoteleros o a la connivencia de ambos. A falta de enemigo conocido, buscamos rostros amables y saludamos a bañistas, veraneantes y cortadores mecanizados de céspedes. El largo Passeig Marítim alberga curiosas mezclas, monumento al Col.lectiu Gay, a la Pubilla, al Greco y también a una Sirena. Se respira libertad y ganas de vivir, seres hermosos, de cuerpos esculpidos , o no, personas de toda edad, sexo, raza y condición , con una sola misión, vivir el momento con alegría y derrochar simpatía, o no. Paseamos ufanos por la calle del Pecat, aún engalanada para que ninguna frágil memoria pueda olvidar la reivindicación. El mar tentador invita al baño, las mesas puestas a beber y comer con fruición, y puestos a pecar, pequemos sin esperar perdón. Abrazos y sonrisas, bromas y chascarrillos, nos acompañan en la vuelta en el trayecto ferroviario, y tal vez, confesemos...confesamos, una pequeña nube de nostalgia humedece nuestros ojos, mientras con la mirada, nos decimos adiós.
Anem pel litoral des de Sitges a Cubelles
Per Sitges,Castell i Turons
Garraf i GR-92 ens porten a Sitges
Jornada de reencuentros y despedidas, tiempo sin vernos, alegría desmedida, y tiempo de ausencia nos espera, con gran melancolía. Al contrario que en la famosa canción, comienza el verano y con él, la dispersión. Los caminos se separan, pero unidos quedamos con el corazón. Bulle el andén de vida, mescolanza de fiesta y de obligación, apelotonados con rostros serios, aquellos que tienen compromiso laboral, relajados y distendidos, los que partimos hacia la diversión. Curiosamente, al llegar a la estación, unos y otros por separados caminos, llegarán a la reunión, unos sentados esperando ser atendidos, y los otros, ajetreados , servirán. Bochorno, mezcla de humedad y calor, golpea nuestros rostros, no en vano el sol madrugó más que nosotros, y llegando al puerto de Vilanova, la bucólica imagen de los cosedores de redes, aquellos que ya sirvieron largos años y los que no superaron el mal de mar. Héroes anónimos y necesarios , cumpliendo sus humildes tareas con devoción. La silueta del Faro nos atrae, y aunque por temprano está cerrado, observamos con interés por las rendijas, apuntando en el debe la visita que perdemos. Coqueteamos con el tren y con la playa, hasta con un búnquer medio derruido, antes de encaminarnos hacia el interior. Nos acoge una pista donde medio nos tapan las ramas, del inclemente sol, al que al fin burlamos, brevemente, al penetrar en sendero. Ruinas de ermita y castilllo nos esperan en la cima, hermosas vistas y algo de brisa. El descenso por asfalto, nos regala las mansiones más o menos acaudalas, y hacemos juegos de palabras con infinity , piscinas y fiestas, resultando en infinity pool party, y todas las variantes que imagineis. Nos ponemos serios al llegar a la Llacuna de la Riera de Ribes. Ya hace tiempo que parecen intentar cortar el Gr, poniendo barandillas, quitando escalones y ahora poniendo tejas y cuerdas, ya que el paso costero está cubierto de agua con marea alta. En nuestra ignorancia no sabemos si culpar a políticos, hoteleros o a la connivencia de ambos. A falta de enemigo conocido, buscamos rostros amables y saludamos a bañistas, veraneantes y cortadores mecanizados de céspedes. El largo Passeig Marítim alberga curiosas mezclas, monumento al Col.lectiu Gay, a la Pubilla, al Greco y también a una Sirena. Se respira libertad y ganas de vivir, seres hermosos, de cuerpos esculpidos , o no, personas de toda edad, sexo, raza y condición , con una sola misión, vivir el momento con alegría y derrochar simpatía, o no. Paseamos ufanos por la calle del Pecat, aún engalanada para que ninguna frágil memoria pueda olvidar la reivindicación. El mar tentador invita al baño, las mesas puestas a beber y comer con fruición, y puestos a pecar, pequemos sin esperar perdón. Abrazos y sonrisas, bromas y chascarrillos, nos acompañan en la vuelta en el trayecto ferroviario, y tal vez, confesemos...confesamos, una pequeña nube de nostalgia humedece nuestros ojos, mientras con la mirada, nos decimos adiós.
Waypoints
Informationspunkt
20 m
Ruiner
Foto
Mat- och dryckesstation
Picknick
Museum
Korsning
Bergstopp
Vildmarksstuga
Monument
Fågelskådningsplats
Utsikt
Religiös plats
Tunnel
Strand
Bro
Ankarplats
Tågstation
Kommentarer (5)
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Information
Lätt att följa
Landskap
Lätt
Buena variante para alejarse algo del litoral. Gracias por compartir
Un bon passeig
Un clàsic
Bonita ruta, acompañado de un buen registro fotografico y una buena descripción. Un abrazo y mucha montaña
Muchas gracias emilio viejo por tus apreciados comentarios.Un abrazo